Por Moisés Aparici Pastor, escritor
Jamás creí que volvería a ver un enfrentamiento tan inútil y vergonzoso, como el protagonizado en esta pelea de gallos y gallinas que sostienen PSOE y UP en su versión Gobierno de España por la Ley del ‘Sólo Sí es Sí’. A tal punto se extiende y escenifica esta guerra que ha dejado de ser soterrada, de puertas para adentro, para convertirse en abierta e indisimulada, que el mago sin chistera Feijóo intentó disuadir, aconsejar a Ramón Tamames, que no acepte liderar la propuesta de moción de censura de Abascal al Gobierno de Pedro Sánchez, aduciendo que: Si fuese mi padre, no le dejaría hacer esto.
Si no teníamos bastante, los votantes y simpatizantes de la izquierda, con ver esta contienda insoportable, va la derecha y su ultra, y se une echando leña en la hoguera: Todo esto es muy folclórico, España es un país serio, lo malo es que esta derecha trasnochada, tampoco es seria. Feijóo le dice esas cosas a Tamames porque su PP está de brazos caídos, encantado, como comiendo palomitas visionando esta lucha encarnizada de sus ya declarados enemigos, que no adversarios políticos, pues al PP le es más rentable políticamente colocarse de perfil y estar callados mientras la izquierda se despelleja entre sí.
Y no crean que la cosa nada tiene que ver la una con la otra, pues es tanto el ridículo o mala fe, que millones de españoles sentimos con esta vergonzosa guerra entre la izquierda, que ha dado alas y aliento al PP y Vox, esta desdeñada derecha que tenemos, para sentirse superiores a la izquierda, y reírse de ellos. ¿No aprecian mucho de locura en este enfrentamiento por una ley muy importante, a la que necesariamente hay que reformar? Hay que actuar siempre en favor de las mujeres, de las víctimas del maltrato y no abismarse en el silencio, pero está claro, reformarla hay que reformarla. Y si UP se enroca en su postura de no reformar esta ley, el PSOE debe reformarla, aunque sea en solitario. El Gobierno de coalición ha funcionado mejor de lo que esa anticuada derecha vaticinaba, desgracia tras desgracia, pero mira por donde, a un año de nuevas elecciones generales, este Gobierno no lo ha hecho tan mal.
Por último, confío en que una trayectoria de peso y reconocimiento de la figura del anciano economista Ramón Tamames de 89 años de edad, no se vea afectada por acceder a esta inocentada moción de censura de la ultraderecha. Más allá de esto ¿por qué Feijóo tiene tanto miedo a que esta moción proporcione munición para que el PSOE recobre fuerza y se deje de hablar entre la opinión pública del enfrentamiento entre la izquierda? ¿Es esa toda la estrategia del ceñudo Feijóo? Estamos de acuerdo en que esta moción es un error, pero me interesa más todo este fárrago de sucesos entre la izquierda.
Por favor, soluciónenlo ya, no más agrias mieles de confrontación, nos jugamos mucho, el crédito de nuestra buena gestión.