Juan Guillem, su hermano Rubén, y su hijo Toni, han culminado una expedición que les ha llevado al Aconcagua. El pasado 3 de enero, los montañeros emprendieron una expedición para ascender a la mítica cumbre andina (6.961 metros), la montaña más alta de América. Los tres partieron desde Alicante hasta Mendoza, y desde allí en coche hasta Puente de Inca, punto de inicio de la travesía.
Bajo la guía del montañero profesional Fernando Errekalde, iniciaron el ascenso el 4 de enero y alcanzaron la cima el 15 de enero, tras un exigente recorrido con campamentos a distintas altitudes. La expedición logró superar un reto con solo 40 % de éxito entre quienes lo intentan, demostrando determinación y resistencia en condiciones extremas.