El parque de bomberos de Ibi registró el año pasado un incremento en el número de intervenciones, al pasar de las 175 que hubo en 2016 a las 283, lo que supuso un 36 por ciento más de salidas.
Pese al importante aumento, los incidentes, en cambio, fueron de menor gravedad y muchos de ellos estuvieron relacionados con el temporal de nieve y viento que hubo a principios de año, tal y como explica el suboficial jefe de la zona operativa de la montaña, Antonio Córdoba. “El inicio de año fue muy complicado y tuvimos que acudir a muchas emergencias, como la caída de árboles; sin embargo, no habido graves siniestros”, indica Córdoba, quien también achaca el incremento experimentado el último año al hecho de que “cada vez se nos requiere más para todo”.
Del área de influencia del parque de bomberos, fue en Ibi donde más intervenciones realizaron el año pasado, 148 frente a las 91 del año anterior. En Castalla también aumentaron, 56 frente a las 25 de 2016 y en Banyeres, acudieron en 32 ocasiones (en 2016 lo hicieron 12 veces). En cambio, la estadística no varia en Onil y Tibi. Los bomberos fueron a la localidad colivenca en 24 ocasiones y 23 a Tibi, el mismo número de veces que en 2016.
En cuanto al tipo de intervenciones, las más frecuentes son la apertura de puertas y los incendios en viviendas. Según explica Antonio Córdoba, “el servicio que más aumenta es la apertura de puertas en viviendas habitadas por gente mayor, que sufre alguna caída o percance. Solemos tener varios casos todas las semanas, unas veces nos llaman los vecinos porque llevan días sin ver al propietario y otras a través de Cruz Roja”.
El año pasado, los bomberos del parque de Ibi tuvieron que abrir 21 puertas y sofocar incendios en 25 viviendas. El resto de salidas fueron para apagar 19 incendios rurales (cunetas y cultivos); cinco incendios en establecimientos, 13 en mobiliario urbano (principalmente contenedores), 17 vehículos, 8 en industrias y el mismo número por quemas descontroladas. También intervinieron en dos rescates de montaña (uno en Banyeres y otro en Onil), en once situaciones de peligro en la vía pública, como desprendimiento de cascotes, caída de árboles y saneamiento de la calzada por haberse derramado gasolina y en ocho ocasiones para retirar enjambres de abejas, entre otros sucesos.
Ampliación del parque
El suboficial jefe de la zona de montaña consideraba una magnífica noticia que el Ayuntamiento haya anunciado que comprará los terrenos colindantes con el parque de Ibi para ampliar las instalaciones “porque llevamos más de 20 años luchando por ello”. Antonio Córdoba explica que el parque tiene una excelente ubicación, con salidas rápidas a la carretera y muy próximo a los polígonos, “con una clara proyección de crecimiento, además”.