Con la incorporación de Raúl Alós a la Jefatura de la Policía Local de Castalla el pasado mes de noviembre, la dinámica de trabajo ha dado un vuelco importante.
Militar de carrera con experiencia en el Ejército en operaciones especiales, además de licenciado en Derecho, master en Seguridad Pública y Privada, y técnico superior en Gestión y Dirección Policial, Alós ha introducido nuevas metodologías de organización para emplear de forma más eficiente los medios disponibles, “lo que ha llevado a reducir de una forma muy relevante los costes en servicios extraordinarios sin dejar de prestarse”, señala.
Para poner en práctica esta metodología dispone de una plantilla de 21 policías (un inspector, cuatro oficiales y 16 agentes), que se reparten en las unidas específicas de actuación creadas: tráfico, administración, seguridad ciudadana y seguridad vial.
Tal y como explica, “se han creado con el objetivo de dar una especificidad a las intervenciones policiales; es decir, especializar a la plantilla para que el servicio que presten sea más y mejor”. Esto, como explica el jefe de Policía, “se basa en un principio de actuación muy sencillo y es que cuando todo el mundo es responsable de todo, nadie es responsable de nada. Así pues, a las cosas hay que ponerle nombres y apellidos y que cada uno se encargue de un cometido”.
Las unidades se han creado en función de las necesidades de la población, marcadas por el equipo de gobierno, y cada agente está adscrito a una unidad. Hay funciones genéricas, “que realizamos todos”, señala Alós, pero aparte, cada agente está asignado a una función específica, con una serie de tareas asignadas dependiendo de la unidad a la que pertenezca.
“Esto duplica el esfuerzo de la plantilla, hace que se trabaje más, mejor, de una forma más especializada y, sobre todo y muy importante, aumenta la percepción positiva de la ciudadanía”. Una de las claves de esta metodología es que se atiende en primera instancia a todos los ciudadanos y después ya se derivan los casos a los servicios correspondientes, porque el cuerpo de policía es el único que está 24 horas, con capacidad para moverse, a disposición del ciudadano.
Herramientas
Una de las tareas de la jefatura es dotar de herramientas a cada unidad y comprobar sus necesidades, optimizando los recursos de que se disponen.
Aún así, reconoce que siempre hace falta formación y recursos materiales y humanos. Sin embargo, en los últimos meses se ha hecho un esfuerzo para dotar a la plantilla de más efectivos, ya que desde el 1 de noviembre se han incorporado tres agentes y un oficial.
Sobre esta cuestión, la edil de Seguridad Ciudadana, Magda Berenguer, recuerda que “en las elecciones nos comprometimos con la ciudadanía que íbamos a apostar por la seguridad, porque Castalla es una de las poblaciones que más está creciendo, y lo estamos cumpliendo”. También destaca la edil el hecho de que en la actual plantilla haya cuatro mujeres.
Unidades de actuación
Para el jefe de Policía, la unidad de administración “es el corazón del cuerpo, es el que bombea en función de las instrucciones de la jefatura”. Se encarga del control de la vía pública, de las terrazas, de las licencias; en definitiva, del cumplimiento de las ordenanzas municipales.
Por su parte, la unidad de seguridad ciudadana tiene mucha incidencia “porque está realizando una tarea muy importante a la hora de colaborar y suplir las carencias que actualmente tiene la Guardia Civil”.
Raúl Alós subraya sobre esta unidad la necesaria y exquisita coordinación que se ha creado con la Benemérita para poder prestar un servicio de calidad a la ciudadanía. Por ello, buscando la eficiencia en los recursos de seguridad, “se ha reforzado este servicio y las intervenciones de las patrullas van dirigidas a evitar los robos en casas de campo, de cables (ahora, precisamente, se está sufriendo una oleada de robos de cable de alumbrado), y también de investigación para obtener patrones de comportamientos, que permitan adelantarse a los hechos”.
Otra de las colaboraciones con la Guardia Civil tiene que ver con la violencia de género y la aplicación del programa Viogen.
La unidad de seguridad vial y relaciones con la comunidad es la más pequeña y una parte muy importante de su tarea va dirigida a organizar charlas en colegios y colectivos locales.
Por último, la unidad de tráfico es la más numerosa “porque la ley atribuye a la policía local esta tarea en exclusiva dentro del municipio y todos los ciudadanos nos vemos afectados de alguna manera por el tráfico”, explica Alós.
Medios nuevos
Además de todo ello, a la Policía Local se la ha dotado en los últimos meses de medios más eficaces para realizar su trabajo.
Entre ellos, están los drones; dos desfibriladores; chalecos antibala para toda la plantilla y se han sustituido los equipos de radiotelecomunicación analógicos por digitales, que permiten ahora a la policía incorporarse a la red de Comunicaciones Móviles Digitales de Emergencias y Seguridad de la Comunitat Valenciana (Comdes).
También existe una apuesta decidida por la información con la ciudadanía a través de las redes sociales, “para permeabilizarse con la sociedad, de tal modo que se les informa pero también colaboran aportando información”, destaca el jefe de Policía.
En cuanto a los nuevos compromisos a nivel municipal, Magda Berenguer explica que los próximos objetivos son dotar a la Policía Local de nuevas y mejores dependencias y abrir un destacamento permanente en Castalla Internacional.
Municipio seguro
Castalla es un municipio seguro, “aunque eso no quiere decir que se produzcan sucesos puntuales o, incluso oleadas, como los robos en casetas y de cableado, que están habiendo ahora”.
Sólo en cable se ha robado más de 40.000 euros.
Ante ello, se han ampliado las áreas de vigilancia y se ha adecuado la red de cámaras de vigilancia en la vía pública, que no funcionaba adecuadamente.
Colaboración ciudadana
El jefe de Policía destaca la gran colaboración ciudadana que existe y puntualiza que “no existe una buena seguridad, si la gente no participa y colabora, porque no podemos tener un agente en cada esquina”.
Por esta razón, emplean una atención especial y “lo que hacemos es retornar las llamadas. Cuando un ciudadano nos llama para comunicarnos algún incidente, luego le llamamos nosotros para informarle de lo que hemos hecho. Para nosotros es fundamental la crítica del ciudadano porque nos ayuda a mejorar”.