El equipo de gobierno ha iniciado un procedimiento para la revisión de oficio del acuerdo de la comisión de gobierno del 5 de mayo de 1987, con el fin de modificar el contrato por el que se otorgó a la empresa concesionaria del servicio de abastecimiento de agua, Aquagest, la facultad para recaudar también la tasa de recogida de basura, con la contraprestación económica de un 2% por gestionar los recibos.
El objetivo de esta modificación del contrato es cumplir con la nueva ley de residuos que obliga a los ayuntamientos a emitir un recibido diferenciado para el cobro de la tasa de basura, al que se le podrán aplicar bonificaciones en el caso de que existan. Estos recibos serán gestionados ahora por Suma.
La modificación del contrato es necesaria para poder cancelarlo, o más precisamente, para anular la parte del contrato que incluye la gestión recaudatoria de la tasa de residuos; una medida que, aunque lleva aplicándose en Ibi desde hace casi cuatro décadas, se ha visto que es nula de pleno derecho por ser contraria al ordenamiento jurídico.
Tal y como explicó el edil de Hacienda, David Rojas, en el pleno, sobre el acuerdo existen dos causas de nulidad: por un lado, incumple la ley de bases de régimen local, que ya estaba en vigor cuando se aprobó el citado contrato, y por otro, no fue aprobado en una sesión plenaria. Rojas ha indicado que se trata de una anomalía y que, “en solo dos o tres municipios de la provincia se cobra la basura con el recibo del agua”.
Ahora, la revisión debe ser ratificada por el Consejo Jurídico Consultivo de la Comunidad Valenciana.
Vox apoyó el proceso, pero pidió que la empresa concesionaria del agua “devuelva las cantidades percibidas indebidamente todos estos años”, y la portavoz del PP, Maite Peñalver, lanzó una advertencia al equipo de gobierno, recordando que este hecho ocurrido hace casi 40 años, puede repetirse porque “el actual equipo de gobierno nos ha querido traer en esta legislatura acuerdos nulos de pleno de derecho, como fue el reconocimiento extrajudicial de créditos del pleno extraordinario del 11 de noviembre, el del famoso IBI, pero finalmente lo dejaron sobre la mesa”.
El grupo municipal Popular se abstuvo en el pleno.