El presidente de la Diputación de Alicante, Toni Pérez, afirmó que el proyecto para transformar el antiguo hotel del Xorret de Catí, en Castalla, en un centro de dinamización turística de la Costa Blanca interior avanza según lo previsto y cuenta con el compromiso firme de la Diputación. Durante un encuentro con la prensa organizado por la Associació de Premsa Comarcal Valenciana, Pérez aseguró a Escaparate: “Estamos cumpliendo y se está trabajando en ello. Nuestro compromiso está siguiendo sus pasos”.
Además, reiteró que la intención de la Diputación con el proyecto sigue firme y avanzanda: “Hay una parte del proyecto que está mucho más avanzada que otras, pero al final se trata de abordar lo que se propuso a Europa para obtener esos fondos, y está funcionando”. El proyecto, que cuenta con una financiación de 5,7 millones de euros procedentes de los Fondos Europeos Next Generation, “está dentro de un plan de sostenibilidad” y según Pérez se está “trabajando en plazo”.
Además, destacó la coordinación de las distintas áreas implicadas: “Hay una parte medioambiental, que es muy importante; una parte del sector productivo y fondos europeos; una parte de turismo, y una parte de arquitectura”.
Según publicó Alicante Plaza en diciembre, la empresa Negrosobreazul SLP ha sido la adjudicataria de la redacción del proyecto de rehabilitación, así como de la dirección de obra y la coordinación de seguridad y salud, por un importe de 141.933 euros. Esta adjudicación se enmarca dentro de un presupuesto inicial de 193.600 euros con IVA incluido y un plazo de ejecución de 105 días.
El dirigente también puso en valor el simbolismo del enclave para las localidades de Petrer y Castalla: “Es una propiedad de la Diputación con componente emocional para Petrer y Castalla, fundamentalmente, con dificultades en ambos lados, cada uno por su orografía o distancia”. Asimismo, reiteró la intención de la institución de culminar este proyecto: “Estamos convencidos, cumplimos la palabra que damos y la palabra que se dio”.
El futuro del Xorret de Catí comenzó a definirse en 2020, cuando la Diputación de Alicante, propietaria del inmueble, evaluó diversas opciones. Según se informó en su momento, se estudiaron propuestas como su conversión en un centro social adaptado para personas mayores o con discapacidad, un espacio deportivo para equipos internacionales o un complejo turístico de primer nivel.
El enclave cuenta con 126 hectáreas de valor medioambiental y paisajístico. Además del hotel, dispone de un rocódromo, cabañas y áreas recreativas, que según datos de Diputación anualmente han llegado a recibir más de 20.000 visitantes.