El Ayuntamiento de Onil ha perdido una subvención de 4.000 euros concedida por la Conselleria de Innovación para realizar un estudio del mercado ambulante. La ayuda, solicitada a principios de año por la entonces concejal Cristina Tango, quedó sin justificar antes del plazo límite del 18 de noviembre.
Cristina Tango responsabilizó al alcalde, Jaume Berenguer, por la pérdida de la subvención, señalando que intentó contactarlo en varias ocasiones sin éxito. Por su parte, Berenguer justificó la decisión argumentando que la subvención cubría solo el 50% del presupuesto total del estudio, obligando al Ayuntamiento a aportar otros 4.000 euros, lo que no consideraron una inversión prioritaria. Además, destacó que el corto plazo disponible para cumplir los requisitos hizo inviable su ejecución.
Según Berenguer, los recursos municipales se destinaron a proyectos con un mayor impacto para el municipio.