por Paula Peidró, concejala de Educación de Ibi
El nivel educativo de una sociedad es uno de los principales indicadores de su desarrollo. En la sociedad del conocimiento, la educación es más necesaria que nunca y la escuela es la mejor forma de educar. La formación nos aporta conocimientos, valores, nos enseña a convivir y nos hace más autónomos y útiles.
Por todo esto es tan importante actuar y luchar contra el absentismo escolar, un fenómeno complejo, donde influyen mil factores diferentes y donde no suele haber dos casos iguales. Todo esfuerzo es fundamental en este sentido. En este curso hemos continuado con el Programa de Apoyo Educativo que se inició para 67 escolares en el primer trimestre y que se ha ido manteniendo a lo largo del año escolar, con los ajustes necesarios que imponía las circunstancia de cada uno de esos niños o niñas. Además, se ha implementado el Programa de Enriquecimiento Educativo de Ibi (PEEI), en esta ocasión orientado al alumnado con grandes capacidades. El equipo de personal que se suman a la tarea de luchar contra el absentismo escolar ha dado ocho charlas de prevención y se ha atendido a 192 escolares de 6º de Primaria.
Este esfuerzo ha dado como resultado una mejora de nuestros ratios de absentismo y su evolución. Este año, son 23 los casos que se han detectado y tratado en Ibi, cinco de ellos en primaria, el resto de secundaria. Afortunadamente, y como fruto de un intenso trabajo, se ha producido una importante mejoría en más de la mitad de los casos y, al menos, se ha podido contener en el resto.
Todo ello es fruto de la implicación de todas las personas que de una manera u otra participan: los docentes y las direcciones de los centros, la policía local, el personal de Servicios Sociales, y la plantilla del departamento de Educación de nuestro Ayuntamiento.
Sin duda, su tarea –muchas veces invisible– es fundamental para que muchos de estos menores hayan retomado la senda de la educación, el mejor camino para lograr sus objetivos de vida y evitar que se pierdan en ese laberinto de la vida.
Como concejala de Educación me siento orgullosa del enorme trabajo que toda esta gente hace en Ibi para evitar que nuestros jóvenes abandonen los estudios a una edad demasiado temprana.
“La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo”, dijo Nelson Mandela. En Ibi, estamos convencidos de ello. Gracias a todos por este esfuerzo colectivo.