El pleno extraordinario del 19 de febrero aprobó la modificación de la ordenanza de la tasa del servicio de recogida de basura, para adaptarla a la Ley 7/2022 de residuos y suelos contaminados, de obligado cumplimiento, que procede de la Unión Europea, con los votos favorables del Grupo Socialista y Som Ibi, la abstención del Partido Popular y el voto en contra de Vox.
Esta ley obliga a que el servicio no sea deficitario y que pague más quien más contamina y su objetivo es la reducción de la cantidad de residuos generados y su correcta gestión para reducir los impactos de la actividad humana sobre la salud y el medio ambiente.
La nueva legislación entró en vigor en abril de 2022 y obliga a los consistorios a adaptar sus ordenanzas reguladoras en el plazo máximo de tres años.
El concejal de Hacienda, David Rojas, explica que “aunque la ley exige a la adaptación de la ordenanza se produzca antes del 10 de abril, no obliga a aplicarla de forma inmediata, lo que ha hecho posible esquivar la subida de la tasa para 2025”.
Sin embargo, el concejal de Hacienda advierte que, en 2026, ya con la nueva contrata de basuras en funcionamiento, la tasa de recogida de basura sí experimentará un incremento. Como contraprestación, Rojas indica que “el servicio de recogida de residuos y reciclaje se optimizará y los ciudadanos notarán la mejoría, ya que llevamos muchos años sufriendo las consecuencias de un servicio contratado ‘a la baja’, totalmente deficitario y precario”.