La edil independiente de AIDU, Julia Cartagena, ha calificado de “actitud autoritaria” la decisión que tuvo el alcalde, José Luis Candela, en el último pleno al impedirle leer un comunicado en el apartado de ruegos y preguntas, instrumento de los grupos de la oposición para ejercer su control al gobierno local.
Cartagena señala que el alcalde “me impidió la intervención, hurtándome el derecho a la libertad de expresión”.
El contenido del escrito era una respuesta de la comunidad de propietarios de Finca Terol a la edil de Servicios Públicos, Mar García, quien había emitido críticas en un anterior pleno hacia la actual junta de propietarios de Terol por las actuaciones que estaba llevando a cabo en el asunto de basuras.
Según la concejal de AIDU, el comunicado estaba referido a tres cuestiones fundamentales: en el retraso de más de tres años que lleva la licitación de un nuevo contrato de recogida de residuos urbanos y impide, según la concejala de Servicios Públicos, mejorar las condiciones del servicio, que son deplorables en la Urbanización Terol.
Sobre el abandono de la responsabilidad municipal para revertir la situación ha provocado, hasta ahora, que fuera la Comunidad la que se encargara, con un criterio equivocado según la actual Junta, de mejorar el estado de la recogida de basuras, con el trabajo de sus operarios.
Y, por último, sobre las graves acusaciones, sin fundamento, emitidas por la concejala de Servicios Públicos hacia la Junta de Propietarios “acusándoles de manipular la información que reciben desde el Ayuntamiento, sólo la que es más beneficiosa para ellos, afirmando que esta Junta no busca el bien común y que no tienen voluntad de diálogo”. Para Cartagena, “son los responsables municipales los que carecen de voluntad de diálogo; los que no asumen sus responsabilidades e incumplen sus acuerdos, lo que demuestra ineficacia en la gestión, graves dificultades en la comunicación y una actitud antidemocrática”.