por Lara Ayala, concejal de Bienestar Animal de Ibi
Para mí, el titular con el que he querido empezar este artículo es muy significativo. Con la entrada de Som Ibi en el gobierno local, Ibi pasó de una concejalía llamada Tenencia de Animales a Bienestar Animal. Esto era una absoluta declaración de intenciones de lo que pretendía conseguir en esta concejalía, bienestar animal engloba a todos los animales de nuestro municipio, trabajar por el bienestar de todos, sin excepción.
Como todo el pueblo sabe, ha sido un año muy difícil, para mí también, me puse al frente de una concejalía que no contaba ni con recursos económicos ni técnicos, por lo tanto fue empezar a construir una concejalía desde cero. Había tres objetivos claros: presupuesto, personal e implicación ciudadana. Desde hace meses se ha trabajado a destajo para poder sacar el convenio de colaboración con la protectora, dado que la entidad arrastra desde hace cinco años una situación precaria al no haberse sacado a licitación este servicio.
Mientras hacíamos encaje de bolillos con el presupuesto se iba elaborando el convenio y daba inicio las primeras reuniones para planificar el voluntariado para mejorar el bienestar de los felinos callejeros y las situaciones conflictivas que se generan. Un trabajo a tres bandas para no perder un solo minuto.
Ahora, tras un año de mucho trabajo, desesperación y por qué no decirlo, situaciones de verdadera angustia, vemos los frutos. Por supuesto que queda mucho por hacer, ahora nos encontramos en el mínimo exigible, pero estamos en un momento en el que esta concejalía puede avanzar, crecer y hacer actuaciones que mejoren la vida de nuestros animales, sin olvidar que ello también mejora la nuestra.
Como decía, se ha tardado un año en crear y firmar el convenio con la protectora dotada de 56.000 euros (la mayor dotación nunca dada), en crear y pagar el contrato menor de emergencia de 15.000 euros, en pagar las facturas atrasadas, en crear y poner en marcha el primer voluntariado de colonias felinas y en dar los primeros pasos para la creación de un departamento que gestione todo esto. Pido disculpas por la tardanza, pero con las cartas que teníamos hemos jugado de la mejor manera posible.
Desde el primer momento quise ponerme al frente de esta concejalía, mi compromiso con el bienestar animal es total. Mi objetivo es crear una concejalía real, dotada de presupuesto y personal, con una estructura organizativa clara y competente.
Doy las gracias al personal de la casa con el que estoy contando, a todas las vecinas y vecinos que se han interesado en el voluntariado de colonias felinas y a la protectora por su gran labor pese a las adversidades.
La creación real de la concejalía de Bienestar Animal es la base de todo, trabajaremos para que esto sea sólo el inicio de un largo camino lleno de proyectos e iniciativas con el objetivo de mejorar aspectos como la salubridad y la convivencia, pero por encima de todo, el bienestar de nuestros animales.